CONTANDO LAS SEMANAS CON SINDEL
SEMANA 12
PALABRA: ÉXTASIS
ÉXTASIS
Se sentaba a mi lado mirando al cielo y en la quietud de la
noche ambos nos dejábamos envolver por la oscuridad. A veces, a lo lejos, se
dejaban sentir unas voces, gritos exaltados, corredizas… otras veces eran
simplemente susurros de alguien que en pareja aprovechaba para pasear.
Agradecíamos esos instantes, sobre todo en esos días difíciles
en los que las crisis habían dado lugar a convulsiones. Había pasado más de un
año desde que por casualidad descubrimos juntos como parar el horror de un
circulo que no dejaba de dar vueltas.
Regresábamos de sus clases de soporte, algo altamente recomendado
en su caso, pero que a él lo ponía especialmente nervioso. Palabras y conceptos
que despertaban su impotencia y que lo llevaban al borde de la locura. Esa
tarde, alargamos el paseo, ya que por experiencia sabía que la noche se nos
presentaba larga. Acabamos entrando en el bosque y lo hice sentar en el suelo
ya que a veces la humedad de la hierba lo tranquilizaba. Se quedó callado y en
un instante dirigió su mirada hacia arriba. La paz embargó el instante que se
prolongo en unas cuantas horas. Él perdido en la inmensidad del universo con
una cara de felicidad que yo nunca le había visto. Esa fue la primera noche que
logró dormir ocho horas seguidas de un tirón.
La experiencia la vamos repitiendo con bastante asiduidad,
ya que el estado de paz en el que entra es absoluto. Al principio lo tomé como
una forma de tranquilidad, ahora estoy convencida que es tal el estado de éxtasis
en el que entra, que llega a formar parte del infinito.
Observar el universo desde los ojos limpios de un niño es algo maravilloso! Hasta uno mismo se pierde muchas veces en la inmensidad del cielo. Me encanta tu relato, un éxtasis distinto y hermoso.
ResponderEliminarBesos
Que dificil entrar en la mente de un niño, pero se aprende mucho de sus ojos y de sus miradas.
ResponderEliminarY de leerte, el texto es precioso . Un abrazo
Qué maravilla... es que el infinito cielo es un éxtasis en si mismo.
ResponderEliminarPreciosidad de relato.
Bss
Esa infinita mirada interior.
ResponderEliminarBesos
La mente es ese órgano donde todo puede suceder hasta lo más imaginable lo podemos ir cociendo allí y luego darle salida , por la mirada o por los hechos. Un buen texto. Abrazos
ResponderEliminarSiempre me atrajopor adentrarme en la cabecita de los niños. Tienen una gran imaginación y su lógica, es curioso, sí.
ResponderEliminarUn beso.
Sin lugar a dudas ese instante es parte del infinito.
ResponderEliminarMirando el Universo...
ResponderEliminarBonito, Molí.
Bonita inspiración acerca del éxtasis.
Que tengas un super día 🏙
Es muy bonito tu texto. Podría valer como una clase de psicología. La mirada embelesada de un niño puede decir muchas cosas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Una mirada de infinita paz.
ResponderEliminarBesos
Apuro su recuerdo hasta el fondo del éxtasis, y laten en el pecho los colores lejanos de sus ojos.
ResponderEliminarManuel Maples
Me gustan tus relatos. Abrazos
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