LAS MONEDAS DEL ESCANYAPOBRES

 CONTANDO SEMANAS CON SINDEL

SEMANA 4 DE 22

PALABRA CLAVE: MONEDA

LAS MONEDAS DEL ESCANYAPOBRES[i]

 Irse de una de sus casas con una deuda de 500 euros era tener complicaciones el resto de su vida, el usurero, ávido de dinero, no dudaba en alquilar sus casas medio en ruinas a unos precios muy por encima de lo que merecían, pero era la ley de la oferta y la demanda, o lo tomas o lo dejas… Así a mi amigo Quim y a su familia no les quedo otra (eso o vivir en la calle) y pagaban comiendo lo que buenamente conseguían en los contenedores cercanos a los supermercados, eran malos tiempos para ellos, buenísimos para el esgaña-pobres.

Dicen que cuando se cierra una puerta se abre otra, así aquel mes de finales de invierno, no hubo forma de juntar los quinientos euros del alquiler, pero a la vez apareció un alma bondadosa que le ofreció a la familia casa y trabajo.

Cuando Quim fue a devolver las llaves, de aquella morada de oscuridad y frio se encontró con las amenazas del usurero:

-         -- Si no pagas te denuncio, me da lo mismo de donde saques el dinero, pero pagarme me pagas, eso te lo juro.

Mi amigo sabia de otras historias que habían acabado muy mal, acoso, amenazas… un sin vivir continuo para los deudores. Así que no dudo en firmarle un papel, tenia todo el verano por delante para trabajar. En septiembre la deuda ascendería a setecientos euros, no sabía si lo conseguiría, pero firmó.

Uno de septiembre, necesitó que le prestaran la furgoneta de su nuevo trabajo, también había conseguido la carretilla en la que acarreaba las verduras. Llamó a la puerta y ante los ojos desorbitados del usurero vacío el saco, setecientos euros en monedas de 1 céntimo. Una colecta en la que no dudaron en colaborar todos aquellos que conocieron el caso. Hasta los niños recogían como locos las pequeñas monedas. Todos en el pueblo querían ver al esgaña pobres arrodillado recogiendo con sus manos moneda a moneda.

Creo que se tiró dos o tres días, que lo hizo con tesón y con los ojos ávidos puestos en aquel cumulo de montoncitos que se iban creando. Para Quim había sido como poner un hueso ante un perro hambriento, porque las deudas, aunque pagadas con pequeñas monedas también quedan saldadas. Aún hoy, años después por aquí lo conocemos como el cuentamonedas.

---

[i] Esgaña-pobres (usurero) personaje creado por el escritor catalán Narcís Oller en la novela que tiene el mismo título: L’escanyapobres.