CONVOCATORIA JUEVERA, JUEVES 9 DE NOVIEMBRE
DIAS DE OTOÑO
Es como si desde siempre hubiera estado aquí, no recuerdo
el primer instante de luz, aunque mis amigos dicen que es normal y que le doy
demasiadas vueltas a las cosas, puede que tengan razón, no se….
Cuando más pequeña, recuerdo las risas de Violeta, fue la más temprana en llegar, lo hizo casi al mismo tiempo que Mimosa, tenían las dos
un colorido y un porte cuando las veía caminar cogidas de la mano ¡Me daban una
envidia! Pero mis amigos susurraban: No tengas prisa, aún no es tu tiempo…..
Poco después llegaron Primura y
Calendula, Lavanda, Azahar y Azucena…..eran muchísimas centenares que jugaban y
danzaban con los chicos. Y yo aquí observando verde de envidia y aguantando los
envistes del viento y la lluvia.
Escondidas con vestidos de hojas intentábamos protegernos
del calor, los más viejos, dicen que ahora los veranos son mucho más largos e
insufribles, escucho atenta el canto de las cigarras esperando que se den un
respiro, se,porque lo dicen también los más viejos, que cuando callen las
cigarras llegará mi tiempo al fin, es solo que estas malditas no dejan de gritar. Yo les susurro bajito: - Anda, por favor iros ya……No es mí tiempo aun, lo presiento.
Y un día así, como por casualidad, mi vestido ahora rojo
va desprendiéndose y cae la sutileza del viento lo arrastra. ¿Pero es que estoy
desnuda? No ya sé que es imposible porque la magia comienza ya.
Mientras Madroño regala sus frutos a diestro y siniestro,
Membrillo perfuma todos los rincones del huerto. Castaña ataca con furia mostrando
sus púas, Escaramujo antes Rosa se cambia de nombre y de sexo.
Por fin estoy jugando, danzando y corriendo, es mi
tiempo, aprendo de mis mejores amigas Avellana y Encina a saltar por los árboles
y en mi árbol en particular puedo hacer el gamberro.
Niños humanos y humanos mayores estar siempre atentos
cuando paséis por el bosque. El otoño ha llegado empujando con viento sus días
hacia el invierno. No corráis cuando escuchéis grujir de ramas o cuando de
golpe os caen encima frutos del roble, y es que después de esperar tanto
tenemos que apresurarnos en jugar.
Firmado: Hayuco (la que lanza frutos de las hayas)
Esta soy yo HAYUCO
Mi amiga AVELLANA
Mi amigo ROBLE
ESCARAMUJO
MEMBRILLO
ANJANA
ENDRINA
ACERICO
CASTAÑA
¡TODAS SOMOS HADAS FLORES DE OTOÑO!
Sencillamente me has dejado sin palabras con tan bello relato , por dios que bonito y bien expresado y tan lindas imágenes.
ResponderEliminarUn abrazo amiga ..feliz noche
¡Qué bonita tu personalización de los frutos y sus imágenes. Hoy casi hemos coincidido: tú con los frutos y yo con las hojas.
ResponderEliminarQué disfrute tu juego de flores... Y esas imagenes tan bellas. Todo es poesía hoy por aquí y me voy reconfortada y felíz de leerte. Gracias.
ResponderEliminarbesos
Un cuento precioso, la verdad.
ResponderEliminarY las ilustraciones elegidas para cada fruto sus hadas y duendes, igual, muy delicadas.
Un beso enorme.
Que lindo escrito, me imegine un bello bosque lleno de vida y colores pasando lentamente con sus estaciones, me gusto mucho
ResponderEliminarBuenos días, Molí:
ResponderEliminarSin duda, el tuyo es un relato con duende: tiene encanto y originalidad.
Un abrazo.
¡Qué bonitos los dibujos! Una descripción fantástica del otoño.
ResponderEliminarUn abrazo
Me gusta eso de las hadas de otoño. Creativos dibujos.
ResponderEliminarUn abrazo
Hola, Moli
ResponderEliminarCuanta magia, dulzura en tu relato. Me encanta la originalidad de tu inspiración, donde nos vas definiendo cada uno de los frutos.
Abrazo!
Muy bien escrito, muy original y las fotos muy bonitas.
ResponderEliminarBesos tonos pardos.
Me ha gustado mucho esta entrada otoña, Inma. Un cuento precioso con las andazas de Hayuco. Yo digo que tendría que llamarle la atención a Verano, que cada día tarda más en desaparecer de la escena dejando su espacio escénico a Otoño.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Me pareció un relato precioso, con esas hadas otoñales que le dan vida a esta época del año. Muy tierno y repleto de magia, tanto por tu forma de escribir como por el relato en sí.
ResponderEliminarMe temo que llegué un poco tarde a colgar el relato, pero poquito a poco os voy leyendo.
Un besazo