CONVOCATORIA JUEVERA PARA EL JUEVES 5 DE OCTUBRE. ESTA SEMANA LA AMIGA MAG DESDE SU BLOG LA TRASTIENDA DEL PECADO, NOS CONVOCA.....
TRECE DE DOS
DUIDON
No recordaba el momento en el que llegó al hogar de la paz,
aunque este se remontaba a las dos décadas anteriores.
El lugar erigido como templo de conocimiento cuando la inteligencia humana parecía
imparable, tornase en un lugar de desdicha desde el
que cada día se lanzaban, en post de no se sabía que, un número incontable de deprimidos. La cuestión, era que los humanos habían
perdido la fe y que nada sobrenatural los conmovía. Fue por aquellos tiempos en
los que el periodismo bardeado era un as
putrefacto en las manos de los poderosos. En unos años en los que era ya
imposible el dominio de las masas por algo consistente y creíble en los que la
inteligencia artificial hizo posible el milagro de lo imposible.
Doidon apareció como de la
nada con una aureola de generosidad que se volcaba
de igual forma entre los poderosos como entre los miserables. La fe y la caridad llenaron de una delicada
luz a aquel nuevo mundo incipiente, en los que a los humanos ya habían perdido
el don de pensar, de sentir o de cuestionarse nada. Fue por eso, que la deleidad de aquel objeto extraño nunca fue cuestionada
por nadie. Las dadivas de los poderosos dejaron
de ser un medio de soborno porque no había nada imposible de realizar en la
forma y antojo que estos desearan.
Pero aquel día, no se sabe muy bien porque Duidon comenzó a dudar, no está muy claro si este estado que le llevo
al inconformismo fue dado por una serie de
cortocircuitos que se alteraron un día que el cielo se abrió y empezó a caer
una lluvia intermitente que resbalaba por los dos orificios centrales de aquel
todopoderoso artilugio. O fue cuando una voz infantil que con toda su inocencia
dejo ir una frase lapidaria:
--Mira si Doidon también llora….
La cuestión es que el máximo exponente de la divinidad en la
época de la inteligencia artificial, desde aquel día no ha cesado de llorar, será
por eso que ahora las lluvias intermitentes se han tornado auténticos temporales.
Muy bien Molí, esa última frase me ha hecho pensar , lluvias intermitentes se han tornado temporales. Quién sabe si una inteligencia artificial no es la causante de todo este tiempo loco... aparte de la mala mano del ser humano.
ResponderEliminarUn besote.
Sería una vuelta al origen de nuestras propias debilidades, Inma. Crear dioses que alcancen a tener alma y sensibilidad. Tal vez ahí aprendamos. Un abrazo
ResponderEliminarMe ha llamado la atención tu frase: "Los humanos habían perdido la fe y que nada sobrenatural los conmovía", porque creo que en el fondo no estamos tan lejos de ese futuro que describes. Y cuando elevas a la "inteligencia artificial" a una deidad, da mucho que pensar tu texto! Me ha gustado mcho! Un abrazote amiga Inma! Marifelita.
ResponderEliminarEs desolador pensar que no estamos lejos de no sentir o perder la capacidad de asombro
ResponderEliminarUn abrazo
No solo lo has salvado genial, es que tiene un tono de escritura elevado que da gusto leer.
ResponderEliminarBesos.
Entre la "inteligencia artificial" mal usada y la perdida de valores de esta sociedad que nos está tocando vivir, no dudo de que ese futuro no es tan lejano.
ResponderEliminarMagnífico relato.
Es un placer, seguir leyéndote.
A dónde nos llevará la inteligencia artificial.
ResponderEliminarMuy bien planteado tu relato, Moli.
Un abrazo.
Wow, me encantó, Molí. Me recordó a la frase: "Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia" de Blade Runner. Y es que al final... ¿qué ocurre cuando los robots, son más humanos que los humanos?
ResponderEliminarUn besazo juevero
No me fío ni un pelo de la I A veremos. Sí conseguiremos averiguar hasta dónde actúa.... lagarto, lagarto...
ResponderEliminarHola Molí, no sabemos qué nos deparará la inteligencia artificial, pero por lo pronto tu relato está muy bien logrado, con esa deidad que llora, supongo que por los humanos y por nuestro futuro...
ResponderEliminarUn abrazo. :)
ResponderEliminarDoidon apareció como de la nada con una aureola de generosidad, y después llegaron las dudas... A ver que nos descubre la era de la inteligencia artificial tan de moda ahora y que ya veremos el prejuicio que causará. Buen relato. Un abrazo
si no creíamos en deidades, aquí tenemos de vuelta al dios de la lluvia.😜
ResponderEliminarLlora porque es fan listoa que sabe que no tenemos srreglo?
Menudo giro ha dado la historia sl final.
La duda es la madre del aprendizaje, igual no es tan tonta esta I A
besosss Inma
Digo yo, y después de esta creación de dioses, con tanto lloro debiera venir otro Diluvio universal ¿No?. No conocía dos palabras de tu texto: deleidad y bardeado. Primera vez que las leo/oigo. Besos Inma.
ResponderEliminarque buena entrada te Felicito
ResponderEliminarla lluvia lava las desgracias, aplaca a los dioses de su ira Ya no hay tiempos que nos enviaran como castigo diluvios de esterminio samitotales y barcos de Noe salvadores. Un abrazo
ResponderEliminarQuizás se este advirtiendo y como seres humanos tercos no damos crédito, se venga una nueva arca y esta vez no nos salva Noe. La IA no me parece mal, lo malo es para que la usará el humano.
ResponderEliminarUn abrazo :)
Qué bueno este texto!! Todavía nos queda algo de esperanza.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu aporte a la convocatoria 🙂. La historia pone en jaque algunas cuestiones supuestamente morales.
Un beso enorme.
Que el dios llore por la humanidad siendo un ente no humano tiene un mensaje para mi: la humanidad no va a ser salvada por los humanos sino por algo exterior a la naturaleza de las personas, que se manifiestan claramente incapaces de solucionar ningún mal global que les aqueje. Tal es el cúmulo de intereses, avaricia, afán de poder, insolidaridad y, sobre todo, egoísmo, que nos atenaza como sociedad en este mundo sin remedio.
ResponderEliminarUn texto del que podemos obtener buen material para reflexionar.
Enhorabuena, Molí.
Por cierto, te invito a comentar mi último relato en marcosplanet.blog