ESTA SEMANA MAX ESTRELLA NOS INVITA A VIAJAR CON LA IMAGINACIÓN A LOS LUGARES MÁS RECÓNDITOS, MARAVILLOSOS E IMAGINARIOS, MI RELATO PUEDE SER VERDAD O PUEDE NO SERLO, OS DEJO LA INCÓGNITA.
SIGUIENDO
LOS SUEÑOS DE JULIAN
Mi nombre es Lucy, mi pelo oscuro, no soy muy alta y me
cuesta hablar ante los adultos. Soy una niña
no quiero crecer y dejar de creer que todo es posible. Vivo en Liverpool
y tengo ocho años, pero eso no importa, puedo tener menos o puedo tener más
depende del momento, porque yo ante todo soy una contadora de cuentos.
Aunque soy pequeña aun, no tengo muchos amigos, los niños
con quien mejor me entiendo suelen ser más pequeños que yo. La fantasía es un don que
se va perdiendo con los años y muchos niños de mi edad parece que ya la han perdido, mis cuentos no parecen importarles a pesar de
que son bastante divertidos.
Julián tiene
cuatro años pero es mi mejor amigo , es callado y tímido como yo, su pelo es
rubio a diferencia del mío, sus ojos son claros, los míos pueden tener tantos colores que aún no sé de
qué color son.
El día que nos escapamos de casa, perseguíamos un sueño
de Julián, porque a veces los sueños se escapan y no queda otra que partir en
pos de ellos. Escaparse fue fácil, lo hicimos mientras mama limpiaba la casa de
Cintia, la mama de Julián. Los dos bajamos de forma sigilosa apretados a la
baranda de las escaleras, abrimos la puerta y salimos. Cuando se persigue un
sueño el camino ya aparece solo, no sé si es por intuición, fue lo que a Julián
y a mí nos sucedió.
En el país de los sueños, aunque no lo creáis, todo es
más real que en nuestros países. Allí los dos somos soñadores, y no nos cuesta
compartir sueños, aquí los dos somos de países diferentes, y cuando estamos en
nuestras respectivas casas hablamos idiomas diferentes. Puede que sea por este motivo por el que a los
dos nos gusta más aquel país, podemos ser iguales porque compartimos sueños y
diferentes porque no siempre el camino que seguimos es el mismo.
La pequeña barca a motor de hace unos días, surcaba un
mar de chocolate espeso, hoy nuestro barco es de vela y navega en un rio lleno
del zumo de mandarina del que tanto le gusta beber a Julián. El cielo turbio
ayer de nata hoy es de mermelada de fresa.
Yo y Julián, Julián y yo cogidos de la mano superamos
nuestros miedos siguiendo nuestros sueños. Subidos en un tiovivo de caballos
multicolores, llenamos nuestras bocas de dulces y caramelos. Hoy solo
encontramos tarta de malvavisco, la probamos y los dos hacemos un gesto de
repugnancia.
– Que gusto más
raro…..
Surcamos un campo de enormes tulipanes rojos, azules y
amarillos. Está oscureciendo y debemos volver antes de que Cintia y mama nos
echen de menos. Nos subimos a un taxi pintado de noticias, parece de papel pero
no lo es. El taxi nos deja en la estación de tren donde los muñecos de
plastilina que hicimos esta mañana nos piden los billetes para subir al tren.
Cuando llegamos a casa de Julián, nos estiramos en la
alfombra cogemos los lápices de colores y comenzamos a dibujar.
- Haré un dibujo para mí papa.- me dice.
Yo al papa de Julián aun no lo conozco, mama dice que es
músico y que está siempre de gira, por eso Julián pocas veces lo ve pero si lo
hecha mucho de menos. En el dibujo de Julián me veo yo con mis ojos de
múltiples colores, estoy volando en un gran cielo azul y mis manos enormes
están llenas de una especie de estrellitas:
– Son diamantes – me dice
·
En el año 1967 The Beatles sacaron el algún St Peppers, uno de los temas
causo una gran controversia, se trataba del tema Lucy in the Sky whit Diamonds,
las malas lenguas decían que las iniciales de la canción LSD, hacían referencia
a esta droga sintética que en teoría ayuda a viajar. La otra versión, la que
dio John Lennon fue que esta canción la escribió después de que Julián su hijo
de cuatro años le regalo un dibujo sobre un sueño. Yo ahora años después soy una
contadora de cuentos universal y por lo tanto puedo corroborar que la historia
real es la que explico John.
Imagínate
en una barca en un río con mandarinas y cielos de mermelada.
Alguien te llama, respondes despacio, es una chica con ojos de caleidoscopio.
Flores de celofán amarillo y verde, amontonándose sobre tu cabeza.
Buscas a la chica con el sol en los ojos y se ha ido.
Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes ah, ah
La sigues hasta un puente junto a una fuente, donde gente con caballos de madera
Comen tartas de malvavisco, todos te sonríen mientras la deriva te lleva
A través de las flores que crecen increíblemente altas.
Taxis de papel de periódico aparecen en la orilla,
Esperando recogerte.
Te subes detrás con tu cabeza en las nubes
Y te has ido.
Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes ah, ah
Imagínate en un tren en una estación
Con porteros de plastilina que llevan corbatas que parecen de cristal.
De repente hay alguien allí en el torno,
La chica con los ojos de caleidoscopio.
Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes ah, ah
Alguien te llama, respondes despacio, es una chica con ojos de caleidoscopio.
Flores de celofán amarillo y verde, amontonándose sobre tu cabeza.
Buscas a la chica con el sol en los ojos y se ha ido.
Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes ah, ah
La sigues hasta un puente junto a una fuente, donde gente con caballos de madera
Comen tartas de malvavisco, todos te sonríen mientras la deriva te lleva
A través de las flores que crecen increíblemente altas.
Taxis de papel de periódico aparecen en la orilla,
Esperando recogerte.
Te subes detrás con tu cabeza en las nubes
Y te has ido.
Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes ah, ah
Imagínate en un tren en una estación
Con porteros de plastilina que llevan corbatas que parecen de cristal.
De repente hay alguien allí en el torno,
La chica con los ojos de caleidoscopio.
Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes Lucy en el cielo con diamantes ah, ah
Posiblemente tenga menos edad que Lucy, porque me ha gustado su cuento, me ha rodeado de fantasía la tarde y ha desparramado colores a mi alrededor. Muy buena referencia a la canción y su leyenda urbana.
ResponderEliminarEn todo caso, me he sumergido en tu mundo y me dejado el cabello como el de Julian y las ideas revueltas y pegoteadas por la mermelada.En definitiva he disfrutado la lectura de tu relato, y por ello, gracias..
besos y buen jueves!!!
Y ¿por qué no?...a mi me encanta escuchar a mi hijo cuando está contando historias, sean de lo que sean...los niños son los contadores de cuentos universales...
ResponderEliminarBesos, gracias por participar
Cada jueves hay un relato que me gusta mucho mas que los otros por algún motivo...Aún he leído unos cuantos, pero desde ya puedo decir que esta fantasía creada sobre una de las canciones que mas recuerdo de mi infancia, me ha dejado con un sabor en la boca a miel de maple, mermelada de fresa y mantequilla de maní.....créeme que para mi no existe nada mas sublime que eso....gracias por esta historia,.bss
ResponderEliminarMi niña interior siempre anda presente pero con tu historia se me ha escapado... Todavía ando persiguiéndola en en esa canción.
ResponderEliminarY me encanta el malvavisco.
Un beso.
"Un mar de chocolate espeso"...qué delicia! Una historia preciosa, yo también creo la versión de Jonh.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu historia del país de los sueños y también me gusta esa canción.
ResponderEliminarUn saludo.
Me encantó... me encantó... me encantó... me encantó... me encantó... y me encantó!!!
ResponderEliminarYo conservo muy bien mi niña interior, y este relato lo sentí, lo viví... maravilloso Molí!
Besos.
Precioso tu relato. Qué nunca se pierda la imaginación, ni de adulto,es lo más bonito que hay.
ResponderEliminarUn abrazo
Interesante y bonito relato.
ResponderEliminarUn abrazo.
Preciosa manera de corroborar el origen de aquella bellísima canción. sin duda nació de esa manera, de un sueño infantil narrado con tan generosa inocencia como la que cuentas.
ResponderEliminarUn abrazo
Una preciosidad!! Lleno de magia. Un sueño que hace soñar...
ResponderEliminarMuchos besos.
Que creatividad de Julian Lennon, que inspiró a su padre.
ResponderEliminarY me gustó lo de mamá dice que es músico.
Que creatividad de Julian Lennon, que inspiró a su padre.
ResponderEliminarY me gustó lo de mamá dice que es músico.
Que creatividad de Julian Lennon, que inspiró a su padre.
ResponderEliminarY me gustó lo de mamá dice que es músico.
ERES UNA CONTADORA DE CUENTOS ESTUPENDA. MI NIÑA PEQUEÑA QUE HABITA EN MI, HA DISFRUTADO MUCHO Y SE HA PUESTO A NAVEGAR POR ESE MAR DE CHOCOLATE ESPESO... UNA UNA GOZADA.
ResponderEliminarBESOS.
Los sueños infantiles siempre han sido una magnífica fuente de inspiración para hermosas canciones. Ojalá mantuvieramos siempre esa capacidad de soñar y crear mundos a nuestra medida. Creo que es la primera vez que te leo, pero me ha encantado hacerlo. Un saludo.
ResponderEliminarMe ha encantado tu relato... un mundo de sueños, de magia, donde todo es posible y que solo los niños, como bien dices pueden ver y acceder a el, porque lo más bonito de la infancia es eso, la capacidad para crear mundos nuevos, ojalá siempre pudiéramos ser niños, tener esa dulzura, esa pureza, esas ganas de vivir y soñar... ojalá...
ResponderEliminarBesines...