CONVOCATORIA JUEVERA PARA EL JUEVES 11 DE FEBRERO, LA AMIGA MONICA DESDE SU BLOG NEOGEMINIS, NOS INVITA A ESCRIBIR......
LA PUERTA
Se mantiene allí, fuerte, robusta con el orgullo de quien no
le afecta el paso del tiempo. ¡Cuántas entradas y salidas! ¡Cuántas pisadas
seguras y titubeantes traspasándola! ¡Cuántas historias para contar si ella
hablara….
Bajo del tren, mi mano pequeña es cobijada por otra mano más
grande y lucha por escaparse. La libertad del pueblo me es robada cuando
llegamos a la ciudad. Mis ojos se pierden maravillados mientras cruzamos el paseo
de La Victoria, a pesar de mi corta edad me se el camino de sobra, porque los caminos que te llevan al paraíso son fáciles de retener, da lo mismo que tengas
dos años o sesenta.
De la calle Concepción a las Tendillas, no hay perdida
posible porque me guía un majestuoso caballero a caballo: es el gran Capitán ya
queda menos….Claudio Marcelo, la Esparteria y ya suelta de la mano corro
atravesando la Corredera un trocito de la calle Sánchez Peña me lleva ante la
puerta abierta totalmente, mi abuela sentada vendiendo especias y ese olor de azafrán
que ha emigrado de la Mancha hasta el centro de Córdoba.
En aquellos años, la puerta se mantenía callada siendo cómplice
de muchos silencios y no me contaba
las cientos de historias que he ido conociendo con los años. Yo sentada en el
poyete y ella callada sin explicarme que esa reja que quedaba bajo mi improvisado
asiento era el punto en el que un número indefino de caras aguantaban sus gritos esperando salir de una cueva que
servía de refugio cuando los aviones republicanos bombardeaban la ciudad.
Sí que me hablo, de los niños y sus juegos, seguro que lo
hizo para no asustarme y porque a las niñas es preferible no hablarles del
horror. Me conto de días felices, de bodas, comuniones y bautizos en los que se reunían todos atravesando la entrada que ella protegía . Los que nacimos en la casa, los que vivieron o los que la visitábamos
con asiduidad formábamos parte de la casa y por ende de ella.
La puerta, mi
puerta continúa allí inamovible, aunque hasta hace poco era la entrada de un
bar. Un enigma para los que lo
regentan el que aquel pequeño habitáculo diera cobijo a una familia con ocho
hijos y que muchas veces nos juntáramos muchos más.
Gracias a esa puerta, a esa casa ahora bar, siempre que
regreso a Córdoba me embarga un sentimiento de volver a casa, A MI CASA. Ahora
solo la sueño, pero sé que continúa allí, inamovible, esperándome, porque puertas como aquella fueron creadas para dar
cobijo.
Es bonito no perder el origen, mi casa ya no existe un centro comercial se la tragó, pero quedan los recuerdos y compartirlos es un reencuentro. Un abrazuco
ResponderEliminarQué belleza de texto! Intenso, sentido, auténtico. Descripción de un tiempo y un lugar que no he conocido pero que, a través de tus palabras, he sentido íntimo y cercano. Muchas gracias por sumarte Moli. Un fuerte abrazo
ResponderEliminarMaravillosa tu aportación, Molí. Real y sincera. Preciosas imágenes descritas; y ese olor a especias que casi se puede percibir…
ResponderEliminarMe ha encantado…
Un verdadero placer…
Abrazo grande, y muy feliz día 💙
Moly me has emocionado. He hecho el camino desde el Paseo de la Victoria a hasta la casa de tu abuela, con el mismo nerviosismo que tú lo hubieras hecho y luego la puerta de tu casa la he hecho mía porque me has hecho una contigo a través de este relato.
ResponderEliminar¡Qué bonito!
¡Esa puerta es preciosa! Y además, preciosa para tu alma, maravillosa por todo lo que te ha dado y tú le has dado...
ResponderEliminarUn texto cálido, encantador, muy entrañable.
Es un gusto leerte porque trasmites mucha calidez y a la vez autenticidad.
Un abrazo (por cierto, te pareces mucho a tu madre) :)
Precioso texto y preciosa historia la que nos has contado, sabes que mis abuelos tenían una puerta muy parecido a esa tuya. Ha sido todo un placer leerte porque nos has dejado sentimientos bien bellos. Un abrazo con todo cariño.
ResponderEliminarUn relato muy íntimo.
ResponderEliminarGracias por compartirnos un trocito de tu vida.
Un abrazo enorme para ti, y feliz fin de semana.😘
Qué bonita vida has llevado, Molí, tan llena de amor, de historias, de tradiciones, de cobijo.
ResponderEliminarUn beso muy grande
Los humanos somos como los salmones, algo nos llama siempre al origen y lo mejor de todo es poder llenarlo de recuerdos y de esa luz que nos guía y nos lleva a responder quiénes somos.
ResponderEliminarUn placer haber podido viajar de tu mano por esos recuerdos tan vivos.
Un beso enorme.
Maravilloso cómo has usado todas las palabras del puzle propuesto. Qué recuerdos tan gratos nos ofreces, y cómo se agradece.
ResponderEliminarUn abrazo, y a seguir bien. Ante tu puerta, tras la puerta.
"... la puerta se mantenía callada siendo cómplice de muchos silencios ..." ... alucinante esta parte... !!!!!
ResponderEliminar\m/ Moli \m/... Abrazos Poetisa
Un relato perfecto y real!! gracias por compartir esos momentos y recuerdos.
ResponderEliminarBss
la nostalgia nos puede muchas vecess, y nosotros encantados de dejarnos. por cierto... "Pehazo de puerta, eh?. si hay que esperar a que se ro. pa, va ses uchar muchas historias y silencio mas
ResponderEliminarBesoss imma
60 no es nada es el blink de una mirada
ResponderEliminarQue bonita niñez has tenido, y que bien nos la transmites. Te confieso que he leido dos veces tu relato para disfrutar del trayecto de tu vida. Gracia spor compartirlo.
ResponderEliminarBesos.
Qué bonito relato, y además, utilizando algunas de las piezas del puzzle, muy bien logrado.
ResponderEliminarBesos.