ONA E IRIS
Intimidad en la noche, una luz tenue refleja la sonrisa de Ona la princesa de la
casa que acaba de ser destronada. Contradicciones, miedos, sentimientos
guardados de la pequeña sonriente ante el milagro de la vida que mantiene entre
sus manos. Sobre la cama revuelta se produce el momento mágico, el encuentro
dulce entre las dos hermanas.
El descubrimiento de la
fragilidad humana, de la dulzura y ternura que transmite un bebe, y Ona si, ahora
deja de lado sus miedos y sus dudas y abre su corazón ante la mirada de Iris la
pequeña que aprende a mirar a esta hermana destinada a enseñarle miles de
juegos y misterios que el día a día le ofrecerá.
Ona muestra una piel
suave, brillante a la luz, acariciada por el sol del verano, su rostro de una
belleza sublime queda adornado por la sonrisa de felicidad que le trasmite Iris.
La niñez es un espacio en el tiempo, instantes preciosos que van cambiándonos y
¿que puede haber más precioso en la vida de una niña de diez años que el
nacimiento de una hermana? A través de Iris, la niña casi adolescente, aprenderá
a ceder, a renunciar, a hacer concesiones, a proteger, a amar de una forma
distinta.
Iris, con solo unos días,
se muestra tranquila y segura en las manos de su hermana mayor y es justo a partir
de este instante en que Ona pasa a convertirse en su protectora y en el Iris
sabe que junto a Ona no podrá sucederle nada malo, comprende que posee el
privilegio de ser la pequeña y de que este
hecho, el del lugar que ocupa en la familia la ara diferente, distinta de la
hermana. Más segura porque tendrá quien vele por ella, aparte de papa y mama.
Momentos de conocimiento,
de silencio, de felicidad de una noche de verano que quedaran para siempre
enmarcados en los recuerdos de Ona y en caminar de la pequeña Iris. Dos miradas
encontradas que a partir de este instante se hacen cómplices, el inicio de un
amor que aunque con vicisitudes se mantendrá con el tiempo, a lo largo de los
años. Ona e Iris. Iris y Ona el mejor regalo que te pueden hacer unos padres:
los hermanos.
Bonitos nombres los de las niñas y un sentido y cercano texto que nos lleva a un mundo privado y personal. Y es que la llegada de alguien nuevo es una puerta a un nuevo mundo que parecía conocido.
ResponderEliminarUna deja de ser princesa para convertirse en reina y la chiquitina pasa a ocupar su puesto y quedar, como dices, bajo su mirada y protección.
Un beso enorme.
Momentos inolvidables que quedan perpetuados en nuestro corazón,
ResponderEliminarBellísimo texto, tierno y me gusta aún más sabiendo que es una historia real.
Te felicito por tus nietos, preciosos.
Un abrazo.
Me encanta tu relato de una noche de verano lleno de recuerdos. Un abrazo
ResponderEliminarPreciosa fotografía y preciosa descripción la que haces. Ese amor de abuela se ve reflejado en toda ella.
ResponderEliminarUn abrazo
Un momento que merece ser retratado, tanto en imagen como en relato, este que haces de una enorme dulzura.
ResponderEliminarBesos y gracias por este precioso aporte. Y enhorabuena por tus nietas.
Un momento mágico que ha sabido captar la cámara y al que tú has embellecido con tus palabras...una imagen muy tierna la de tus nietas.
ResponderEliminarHas puesto tanto sentimiento en tus palabras que trascienden el caso individual de tus nietas Ona e Iris convirtiéndolas en símbolo del amor entre hermanas. Que lo disfruten siempre al igual que sus padres y tú. Un abrazo.
ResponderEliminarPero que requetebién lo has descrito, lo he experimentado entre mis nietos Hugo y Pol. No se puede describir mejor ni con más sensibilidad.
ResponderEliminarEnhorabuena por tener esa obra de arte de la naturaleza tan cerca de tus ojos, de tu corazón y de tus letras, las que nos regalas hoy para nuestro disfrute.
ResponderEliminarbesos.
Enhorabuena por tener esa obra de arte de la naturaleza tan cerca de tus ojos, de tu corazón y de tus letras, las que nos regalas hoy para nuestro disfrute.
ResponderEliminarbesos.
Enhorabuena por tener esa obra de arte de la naturaleza tan cerca de tus ojos, de tu corazón y de tus letras, las que nos regalas hoy para nuestro disfrute.
ResponderEliminarbesos.
Una perfecta fotografía, llena de vida, de inocencia, de belleza. La descripción es muy sutil, tierna de esos momentos tan íntimos he inolvidables entre dos hermanas.
ResponderEliminarSaluditos
Me ha encantado la forma en que retratas ese primer encuentro entre hermanas, una, superando el miedo a ser destronada, la otra, descubriendo la calidez de quien será su compinche y guía, seguramente.
ResponderEliminarUn hermoso retrato nos has pintado, gracias por compartir este momento tan especial de tu familia.
Un abrazo
Me has hecho recordar con tus palabras una frase que mi madre decía: "¿Como criaste a tus hijitos?... queriendo al más chiquito". Es lo que se desprende de tu amor de abuela, y es lo que se desprende de esa fotografía en que, por primera vez, dos hermanas se miran a los ojos mientras una de ella deja lejos las dudas e incertidumbres y en su interior se promete protectora y guía de su hermana recién nacida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Que bonita imagen, que preciosas niños y que adorable abuela... Me gusta el AMOR en mayúsculas que se desprender de tu imagen, de tus palabras... Y es que cuando anuncian la llegada de un hermano más pequeño crecen las alertas pero luego lo ves tan pequeño e indefenso y te prometes a ti misma que cuidaras de esa criatura tan hermosa que te va a quitar el puesto de la peque de la casa sí, pero que te hace ascender en rango... Muy bonita descripción!!
ResponderEliminarYo como la hermana de el medio, me siento la peque y la protectora a partes iguales...
Besines...
¡Cuántos sentimientos hermosos...cuántos valores que nos redimen de tantas catastrofes!
ResponderEliminarHermanos... compañeros inigualables de la vida. Atesorar este cariño nos hace fuertes.
Una fotografía en imagen y en palabras que inunda el alma de alegría.
besos de abuela a abulea ;)
Tu retrato me ha emocionado... Es precioso y tierno, que foto tan... hermosa.
ResponderEliminarMuchos besos.
Tu retrato me ha emocionado... Es precioso y tierno, que foto tan... hermosa.
ResponderEliminarMuchos besos.
Muchas gracias por vuestros comentarios, realmente cuando vi la foto de Ona e Iris me inspire al momento, havia vivido las contradicciones y los miedos de Ona desde muy cerca y viendo esta foto me senti enseguida tranquila, senti que la vida y el amor fluian como siempre a traves de loa años ha ido ocurriendo.
ResponderEliminarMuchas gracias por vuestros comentarios, realmente cuando vi la foto de Ona e Iris me inspire al momento, havia vivido las contradicciones y los miedos de Ona desde muy cerca y viendo esta foto me senti enseguida tranquila, senti que la vida y el amor fluian como siempre a traves de loa años ha ido ocurriendo.
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